Internet ha cambiado drásticamente la forma de ofrecer productos y servicios. Nos ofrece la posibilidad de llegar a un público mucho más grande y a través de multitud de canales, con un grado de segmentación y personalización enormes. Pero a su vez introduce nuevas estrategias, métricas e indicadores que deberemos conocer y manejar para sacar el máximo partido.
Como hemos comentado en posts anteriores, la simple presencia de una empresa en la red no es garantía de éxito o de más visibilidad inmediata. Cualquier actividad en la red debe tener tras de sí una estrategia marcada, un plan digital y de comunicación con objetivos establecidos que nos permita crecer a medio y largo plazo.
En el caso de las empresas que tienen como modelo de negocio la venta online a través de un ecommerce, esta estrategia se hace si cabe más imprescindible y debe ejecutarse de manera constante en todos los procesos de la preventa, venta y postventa.
Lo que es evidente es que el ecommerce ha vivido un crecimiento exponencial en los últimos años y seguirá en esa tendencia en los próximos. La mayor penetración de Internet a nivel global, el uso de dispositivos móviles las 24 horas del día y las buenas estrategias de marketing de pequeñas, medianas y grandes empresas han hecho que los datos de facturación se multipliquen año a año. El usuario medio cuenta cada vez con más confianza en el medio online y la compra a través de la red, y además cuenta con más herramientas que le permiten comparar, leer opiniones y valorar todo antes de su decisión de compra. Y, por supuesto, sin moverse de casa o sin la necesidad de desplazarse a una tienda física para elegir lo que desea.
En el caso de España, la facturación por venta online ha crecido una media del 20% anual desde 2005, un dato significativo. Será importante observar lo que ocurre a partir de ahora, pues la competencia es muy alta, cada vez hay más marketplace en la red y las estrategias definirán mucho el éxito o no de cualquier tipo de negocio. En otros países como Francia, Estados Unidos o Japón, el número de tiendas es muy elevado, con mucho crecimiento de tiendas online locales, algo que puede hacer que la facturación media acabe descendiendo por la masificación de comercios en la red.
Cualquier pyme que dispone de su tienda online como parte importancia de su negocio anhela el éxito, el crecimiento de sus ventas y unos niveles de facturación que año a año crezcan. Si tomamos un ejemplo de referencia a nivel mundial como modelo de éxito ese es, sin duda, Amazon. Sus datos de ventas desde 2007 hasta la actualidad son espectaculares, y el crecimiento asombroso. Las perspectivas para los próximos años siguen en la misma línea, y se estiman ventas por un valor de 158.000 millones de dólares para 2018.
Pero, ¿dónde reside la clave del éxito de un ecommerce? Algunos aspectos básicos:
Nos detenemos en este punto, el de la métrica, para darle la importancia que merece en un modelo de negocio basado en la venta online. Afortunadamente, la red nos permite un seguimiento total de muchísima información alrededor de nuestro ecommerce, y eso es un gran apoyo para hacer que la empresa siga creciendo y vendiendo más.
Para ello, eso sí, hay que determinar muy bien qué queremos medir y de qué herramientas vamos a apoyarnos. Por lo tanto, deberemos definir los KPIs (key performance indicator) o indicadores clave que nos ayudarán a valorar resultados.
Definamos algunos indicadores clave de medición para nuestro negocio online:
Lógicamente, para poder medir y monitorizar toda la actividad online que rodea a nuestro negocio en la red, necesitaremos el apoyo de varias herramientas. Existe una gran cantidad de herramientas gratuitas que nos darán muchos datos, si bien también es muy recomendable apoyarse de algunas de pago que nos permitirán una medición adecuada del conjunto de información que necesitamos.
Para obtener datos sobre el Coste por Adquisición o el Coste por Lead, por ejemplo, todo dependerá de las campañas que hagamos realizado para captar a nuevos usuarios. En el caso de Google Adwords o Facebook Ads, por ejemplo, las propias plataformas nos darán el dato de cuánto nos ha costado cada usuario, cada clic o la tasa de conversión.
Para medir datos como el número de ventas medio por usuario o el Retorno de la Inversión (ROI), así como otros datos relativos a tus ingresos, será importante la plataforma de tu negocio. Encontrar una solución tecnológica o un software que te aporte más datos te facilitará la evaluación de los mismos. Hoy en día conocemos gestores como Woocomerce, Magento, Prestashop y otros que nos permiten gestionar el ecommerce y contar después con datos sobre las ventas, pero cada negocio debe saber cuáles son sus particularidades y que herramienta le puede funcionar mejor.
Para medir datos relativos al tráfico de la página, las páginas más visitadas, el tiempo medio del usuario o las fuentes de referencia, Google Analytics es una perfecta herramienta, y gratuita, para tener muchísima información que deberemos filtrar adecuadamente.
La medición del SEO se puede realizar con la combinación de varias herramientas gratuitas o de pago como Semrush, Sistrix o Kissmetrix, entre muchas otras soluciones tecnológicas interesantes.
Por último, para llevar un control al detalle del negocio y la cuenta de resultados, el software de gestión de la empresa será clave y nos permitirá realizar gráficas de evolución del conjunto de la empresa.
A todo ello habrá que sumar un equipo humano capaz de filtrar y analizar todos esos datos, uniendo a las herramientas otro software de ofimática o gestión de datos que nos dé la información final que deseamos.
Recibe, cada dos semanas, todas las novedades sobre las tecnologías de la información para empresas.